El diseño de las cejas es sumamente importante. Aunque puedan estar muy bien cuidadas y definidas, un arco mal hecho o un grosor poco favorecedor, pueden sumarnos años y hasta endurecer las facciones.
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Para sacarle el cuerpo a ese problema en particular, lo ideal es evitar los siguientes 4 diseños que además de envejecer, suelen apagar la mirada y desencajar el rostro.
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Cejas redondas
El diseño de cejas redondeado es uno de los tantos que los expertos evitan, pues además de envejecer, enfatizan las patas de gallo; así que no es una opción para quienes quieren sumarle jovialidad al rostro.
Cejas cortas
Las personas con poco vello suelen tener las cejas bastante cortas y hasta claritas, lo que ocasiona que el rostro no se vea definido ni mucho menos enmarcado. En estos casos, lo ideal es pintarlas con sombra, lápiz de cejas o recurrir a las infalibles técnicas, como el microblading para darles más longitud y forma.
Cejas finas
Hay quienes son fanáticos de llevar las cejas como en los años 90 sin importar el impacto que pueda generar en su rostro. Este diseño además de endurecer las facciones también suma muchos años por lo poco sútil que es.
Cejas caídas
La terminación de las cejas es sumamente importante, pues, así como las muy cortas afectan la imagen, las que tienen una leve caída también son poco joviales. Así lo que lo ideal es lograr darles una terminación mucho más recta que no potencie los párpados caídos y le den mayor proyección a la mirada.