Un lamentable caso se dio en el Zoológico de San Luis luego de que una elefanta asiática falleciera poco después de que su manada se agitó por culpa de un pequeño perro que andaba suelto, según informaron las autoridades del zoológico el pasado martes. La elefanta, de nombre Rani, habría muerto el viernes a sus 27 años.
“Estamos absolutamente devastados. Pedimos los pensamientos y el apoyo de la comunidad durante este difícil momento”, dijo el director del zoológico, Michael Macek, en un comunicado de prensa. “Nuestro equipo de expertos profesionales en el cuidado de animales hizo todo lo posible, pero no pudimos salvar a Rani”.
Un perro pequeño habría agitado a la manada de elefantes
Un perro pequeño, desatado y perdido fue visto corriendo en una zona no pública cerca del Establo de Elefantes el viernes por la tarde. Los trabajadores de cuidado de elefantes estaban tratando de contener al perro, pero un elefante fuera del granero se agitó y fue trasladado al interior, dijo el zoológico.
Según recogieron los medios, Rani ya estaba dentro del establo, comiendo, y no vio al perro. Pero los miembros del equipo de cuidado de elefantes “observaron que Rani se agitaba como reacción a las vocalizaciones de la manada. Vieron a Rani dar vueltas y vocalizar, todo ello en un periodo muy breve, antes de desplomarse”, dice el comunicado del zoológico.
Los intentos de reanimar a la elefanta fueron infructuosos, pero por suerte el resto de la manada se calmó rápidamente, según el zoológico.
Los resultados iniciales de la necropsia mostraron algunos cambios preexistentes en el corazón de Rani, pero se están realizando más pruebas y los patólogos del zoo aún no saben si esos cambios influyeron en su muerte.
Sobre el can, aún no está claro cómo entró el zoo, que está situado en medio del extenso Forest Park. El zoológico admite animales de servicio con ciertas restricciones, pero no mascotas de este tipo, explicó una portavoz.