Si lo explicamos de forma médica, la gastritis es una afección común que afecta el revestimiento del estómago, causando molestias y malestar. Pero si la sufres saber que es un ardor en la boca del estómago que no te deja estar cómoda con tu cuerpo, así que es fundamental que tomes especial atención a tus comidas y evitar aquellos alimentos que puedan desencadenar síntomas.
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¡Sí! Puedes aliviar los síntomas de la gastritis y mejorar tu calidad de vida evitando las comidas grasosas y frituras. Los alimentos ricos en grasas pueden desencadenar episodios de acidez estomacal y empeorar los síntomas de la gastritis, por lo que las papas fritas o el pollo frito deben ser sustituido por carnes magras a la parrilla, pescado y alimentos cocidos al horno o al vapor.
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¿Amas el picante? Pues te romperemos el corazón. La salsa picante y las especias fuertes pueden irritar el revestimiento del estómago y agravar los síntomas de la gastritis. Esto incluye bajar el consumo de pimienta negra, el vinagre y las salsas ácidas, y sazonar tus comidas con hierbas suaves y condimentos suaves.
¡Sube tu copa solo en ocasiones especiales!
El consumo de alcohol puede aumentar la producción de ácido en el estómago y provocar inflamación. Los refrescos y las aguas gaseosas también ayudan a la distensión y más si los bebes en exceso, por lo que a nivel de líquidos lo más importante es beber agua pura, infusiones de hierbas o jugos naturales.
Los alimentos ácidos, como los limones, naranjas, pomelos, los tomates y encurtidos, son otros que van a la lista negra. En su lugar, compra frutas de bajo contenido ácido, como plátanos, manzanas y peras maduras, estas te refrescaran como un vaso de agua en 40° de calor en verano. Si bien no es eliminar estos alimentos por completo, lo ideal es moderar su ingesta y claramente, consultar a su médico de confianza para una dieta más personalizada.