Las poleras o camisas polo son una pieza de vestir de hombre que definitivamente debes tener en tu closet. La razón es simple: son prendas versátiles y adaptables que siempre dan un plus de sofisticado a tu look. Puedes combinarlas con casi todo y te ayudan a estar listo en poco tiempo. Pero hay algunas reglas que debes seguir para que tú y tu polo se vean bien juntos si ya tienes o pasaste los 40 años.
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Primero debe reconocer una polo de buena calidad. Lo importante es la tela, si es gruesa o delgada no es relevante, pero sí debes fijarte en el tipo de tejido. El de punto piqué, que por cierto no tiene nada que ver con el ex de Shakira, es entrelazado, haciéndolo flexible y transpirable, el más popular y de buena calidad.
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Mientras que el tejido de punto, es igual al anterior, pero con una superficie más lisa, usado en los de menor costo y se transparenta con facilidad. Revisa que los cuellos y mangas retornen a su estado original después de estirarla. Si demoran o no vuelven, no dudes en irte de la tienda.
¿Cómo puedo usar el polo?
Usa la talla perfecta. Tiene que adaptarse bien a tu cuerpo, ni demasiado grande ni muy ajustada. Cuida que los hombros de la prenda se ajusten bien a los tuyos. Lo ideal es que la manga quede a la mitad de tus bíceps o algo encima de ellos. El largo del polo no debe sobrepasar los bolsillos traseros o braguetas de tus pantalones.
¿Dentro o por fuera? Si la parte trasera de la camisa es más larga que la delantera, significa que fue elaborada para fajarse. Si la llevas por dentro te dará una apariencia mucho más formal, solo asegúrate de combinarlo con el cinturón y pantalón para conseguir tu objetivo según la ocasión.
Abotonar o desabotonar. Si tu polo tiene tres botones, puedes liberar uno o dos de ello, pero nunca los tres, a menos que haya mucho calor, pero aún así no querrás verte desfachatado.
El color. Ten en cuenta en tu armario una polo blanca, azul oscuro o negra, con los que te verás más sobrio, elegante y más fuerte, perfectos para ocasiones formales. Usa el naranja, rojo y amarillo para eventos más casuales, pero no que sean colores muy estridentes. No abuses de los estampados, con los diseños más uniformes ganarás más puntos.
