Las várices son un problema que va más allá de lo estético, pues son producto del debilitamiento de las válvulas unidireccionales que se encargan de regular el flujo sanguíneo, esto trae como consecuencia que la sangre no retorne al corazón de manera eficiente.
La mayoría de las venas varicosas presentan un color rojizo o amoratado muy visible a simple vista. A medida que esta condición empeora puede producir hinchazón, dolor, coágulos de sangre y úlceras.
Hay diferentes grados de várices, que van del grado 1 al 4, siendo el grado 4 el más grave pues la persona desarrolla eczemas o úlceras. Si este es tu caso, lo ideal sería acudir al médico para recibir el tratamiento adecuado.
En el caso de los grados 1, 2 y 3 puedes emplear este remedio casero para aliviar los síntomas y reducir las várices.
Cómo preparar la crema de vinagre y zanahoria
Para preparar esta crema natural, necesitarás 115 gramos de zanahoria rallada, 115 gramos de aloe vera y vinagre de manzana. Es importante usar la misma cantidad de zanahoria y aloe vera.
Lo primero que debes hacer es extraer el gel de la penca del aloe vera, para ello corta las espinas de la penca a sus costados, luego realiza un corte transversal y, con la ayuda de una cuchara o con el mismo cuchillo, retira el gel.
Echa la zanahoria en una licuadora y licua durante unos minutos, añade el gel del aloe vera y vuelve a licuar. Ahora procede a añadir, poco a poco, el vinagre de manzana, hasta obtener una pasta suave y cremosa, que no quede líquida.
Esta crema la puedes aplicar diariamente sobre las várices, masajeando en sentido ascendente, es decir, empiezas en los tobillos y luego vas subiendo a las pantorrillas, así estimulas el flujo sanguíneo.
Deja que la crema actúe durante 30 minutos, para que después puedas sacártela con agua fría o tibia.