Los recibimos, los intercambiamos, a diario pagamos con ellos. Muchas veces los entregamos de vuelta casi sin verlos, pero muchas veces los billetes esconden características que los hacen muy valiosos a los ojos de los coleccionistas. Tal es el caso de un billete de 10 soles, muy escaso y raro, que puede venderse en algunos círculos hasta en 400 soles.
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El billete de 10 soles comenzó a circular en 1991. “El primer modelo es alusivo a José Abelardo Quiñones, el aviador, también se puede ver su avión. A la vuelta del billete se observa el vuelo invertido con el cual se graduó en la academia, un billete muy escaso y difícil de conseguir”, informó Efraín Ramos de la cuenta Numismática Inca.
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“Este billete es bien escaso y dependiendo de su estado y de la serie su precio puede comenzar en 30 soles”, explicó. Sin embargo, en el video del billete de los cinco millones de intis, Ramos cuenta que “en subastas, el billete emitido en 1991 se ha vendido hasta en 400 soles”.
¿Cómo es el billete de 10 soles de 1991?
Diferente al que se ve hoy, con Chabuca Granda en el anverso, el billete de 10 soles de 1991 está dedicado al aviador Quiñones. Lo dominan tonos verdes y se siguió emitiendo durante muchos años más, hasta que en 2011 se le cambió el diseño, manteniendo a Quiñones en el anverso.
Si se logra obtener uno de estos billetes, todavía en circulación legal, o se tiene uno y se busca venderlo, la mejor opción es contactar con un círculo de coleccionistas numismáticos en sus páginas en redes sociales. En Facebook se consiguen varios grupos, así como también algunos expertos interesados en los alrededores de la plaza Francia, en el cercado de Lima.
No todos los billetes podrán venderse en el mismo precio. Dependerá, principalmente, el estado de conservación de la pieza, pero también otros elementos que destacan para los expertos.
