¿A qué edad empezar a hablar de sexo a nuestros hijos?

La sexualidad es parte de la vida. Por eso durante todas las etapas hay que orientar a los hijos sobre el tema. Cada edad tiene una forma de orientación.

Para la mayoría de los padres no es fácil hablar de sexo con sus hijos. Todavía hay mucho tabú al respecto, pero es importante que como adulto derribes las barreras y sepas en qué momento abordar el tema según la edad de tus niños y adolescentes.

El hogar es el mejor entorno para infundir en tus hijos los valores con los que pueden protegerse en un futuro. Recuerda que si tú no les hablas del tema sexual, otros lo harán por tí. En algún momento, se toparán con conversaciones directas y explícitas sobre sexo, así que ¿Qué mejor que hacerlo con la orientación inicial de sus padres? Antes que otros los guíen inadecuadamente, tú puedes hacerlo.

Judit Lavernia, psicóloga especializada en crecimiento sexual y de pareja, explicó a La Vanguardia que no es igual sexo a sexualidad. Lo primero se refiere a las prácticas sexuales y lo segundo implica las emociones, la construcción social y cultural.

La sexualidad la van viendo los niños desde muy pequeños en la forma en la que se relacionan sus padres entre ellos.

Aprovecha cada ocasión para hablarles del tema. Por ejemplo, si están viendo la televisión y hay una escena sexual, puedes explicarles. Si se topan con animalitos buscando apareamiento, puede ser un buen momento. Debes hablarle, según su edad.

También debes considerar ir al ritmo en el que ellos vayan según sus cambios físicos y forma de pensar. Si ellos te preguntan algo, respóndeles, no evadas el tema.

Toma en cuenta que no debes hacer sentir intimidado a tus hijos cuando surja el momento de hablar de sexo, mucho menos si son ellos quienes te preguntan. No los regañes, ni lo intimides porque esto les hará sentir que el sexo es malo y hará que no et quieran conversar sobre eso contigo más adelante.

Habla del tema de forma abierta conforme a su edad y con naturalidad. Hazles sentir que ellos pueden confiar para hablar del asunto contigo y que tú puedes ayudarlos.

Conversación según la edad

Ya hemos expuesto sobre la importancia de hablar del tema sexual con los hijos, pero ¿Cómo hacerlo según su edad? La revista Business Insider ofrece una guía. En las siguientes líneas te presentamos la recomendación de este medio especializado en base a expertos.

Menores de cinco años

A esta edad es bueno enseñarle a identificar si son niños o niñas. Decirles cuáles son los nombres de su genitales y de su cuerpo en general, pero no inculcarles a nombrar sus partes íntimas por apodos, sino claramente por sus nombres: pene y vagina.

Es bueno irles explicando, según ellos mismos vayan preguntando y expresando sus dudas.

Hay que enseñarles la importancia del consentimiento. Mientras más temprano se enseñe esto, mejor porque con ello les ayudarás a evitar abusos.

Explícales que nadie debe tocar sus partes íntimas y recálcales la importancia de decir no ante cualquier situación que los haga sentir incómodos.

Entre los 5 y los 10 años

En esta etapa son más curiosos. Es aquí cuando ellos comienzan a formar su identidad sexual por su género.

Joshua Klapow, psicólogo clínico, refiere que debes recalcarles la importancia de decir no cuando ellos se sientan incómodos ante alguna situación.

Business Insider cita a la Academia Estadounidense de Psiquiatría Infantil y Adolescente la cual explica que es aconsejable hablarles sobre la historia de su nacimiento, diciéndoles que la semilla o esperma del papá pasa por su pene a la través de la vagina de mamá y que así se forman los bebés.

Es común que les surja la duda de las erecciones. Puedes explicarles haciéndoles ver que es normal que por momentos el pene se ponga duro y derecho. No los avergüences si notas que ellos indaguen sus cuerpos.

De 11 a 13 años

Empieza la pubertad. Comienzan los cambios físicos como el crecimiento del vello y de los senos, también la menstruación. Se fortalece la atracción hacia otros y los sentimientos.

Es bueno explicarles los cambios que experimentarán y decirles que es normal.

Mayo Clinic resalta que es un buen momento para hablarles sobre los sueños húmedos, las citas, la masturbación, los valores y las enfermedades de transmisión sexual.

Business Insider expone que la Asociación Estadounidense de Psicología reveló que los 13 años es la edad promedio cuando un niño ve pornografía, 43,5 % de los varones lo hacen de forma accidental. Por eso, a esa edad hay que decirles que lo han visto en esas escenas es por actores y que no todo lo que se ve en esas imágenes pasa en la vida real.

Es bueno hablarles sobre cómo puede afectar en sus vidas el sexteo, es decir, enviar por teléfonos fotos o videos de sus cuerpos desnudos. Explicarles el riesgo de que pueden difundirlos y afectarles.

De los 14 años en adelante

Habla abiertamente con tus hijos sobre el tema. Business Insider reseñó que que según estudios, los hijos que hablan con sus padres de sexo retrasan el momento de las relaciones sexuales, y si lo hacen, es con protección.

Conversa con ellos sobre la importancia de evitar la promiscuidad y que esto es riesgo de enfermedades de transmisión sexual.

No te escandalices si te dice que tiene novio o novia, sino oriéntalo sobre la mejor manera de llevar la relación. Es mejor que los tengas cerca, a que estén lejos de ti con su pareja. Teniéndolos cerca, podrás orientar no solo a tu hijo, sino también a su pareja, si ambos son de la misma edad.

Diles que el licor y las drogas pueden llevarlos a conductas que los saquen de control. Háblale de los métodos anticonceptivos.

Lea Lis, psiquiatra de adultos y niños, aconseja preguntarles directamente sobre su nivel de actividad sexual, si los han besado, a qué tanto han llegado, pero no hacerlo de modo intimidatorio, sino dándoles confianza.

Lis recomienda expresarles que la sexualidad se disfruta más sin alcohol ni drogas. Solo estando consciente disfrutarás con tu pareja.

Enséñales que el momento del disfrute sexual es tan importante para él o para ella misma, que debe ser por decisión propia y no por sentirse presionado por su pareja o por el entorno.

Oriéntales expresándole que no se sientan obligados a hacer lo que no quieren hacer. Recuérdales que deben decir NO cuando algo les incomode y que deben alejarse si se sienten en peligro.

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