La entrevista de la “Reina de la Televisión”, Gisela Valcárcel, con Luis “Cuto” Guadalupe causó revuelo en las redes sociales. En su paso por “La Fe de Cuto”, la actriz y presentadora hizo un recuento por su vida personal y artística, y los diversos matices que pintó Gisela dejaron emocionados a todos los televidentes en espera de una segunda parte.
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Pero no solo los seguidores quedaron “encantados” por Gisela, y muchos de ellos expusieron al Cuto desde los comentarios. “Cuto: ponte babero... hahahaha”; “Cutí estabas babeando 🤤 admítelo jajajaja …”; “Cuto ya que se te salían los ojos cutinho”; “Miren la cara del Cuto”; “Al cuto se le cae la baba por gisela.. Q bella mujer”.
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Sin duda, quedó al descubierto. Pero la verdad es que el deportista ya había revelado que la “Reina de la Televisión” fue su primer amor platónico, lo que desató un daño colateral al dejar de lado a Janet Barboza. Hace unos días la presentadora de “América Hoy” encaró al también conductor de “La Fe de Cuto” y este aclaró que por antigüedad primera estaba Gisela y luego ella.
Luis “Cuto” Guadalupe removió la esencia de Gisela Valcárcel
El impacto de todos los fanáticos de “La Fe de Cuto” fue tangible en los comentarios. “Me gustó la entrevista, estas abarcando varias épocas”; “por algo es y será la única reina de la TV, tanto mensaje positivo, enseñanza, humildad. Ameee la entrevista! ya quiero ver la segunda parte. Lindo Cuto!”.
Pero lo más emotivo de la primera entrega de una hora es cuando Gisela recuerda detalles de su infancia. “Siempre recuerdo los carnavales, la matachola… ¡ay que miedo le tenía a la matachola!”, comenta la empresaria tras la pregunta de qué recordaba de su barrio. “Los hombres corrían detrás de todas las chicas del barrio con la matachola en la mano”
“Recuerdo el haber hecho colectas para la virgen que hubo en el Pasaje Sebastián Barranca… recuerdo la solidaridad que se encuentra cuando tienes menos… Eso me hizo falta mucho tiempo, ya no, pero el tocarle la puerta a alguien… Si me parece extraño vivir en un edificio en el que no veo a mis vecinos”, continuó narrando Gisela con un tono de voz conmovido.
