Shakira y su exsuegra, Montserrat Bernabeu, llevaron una buena relación hasta que duró el amor entre ella y Gerard Piqué.
Ahora parece que pasaron a actuar como completas desconocidas y que la colombiana tampoco tiene intenciones de llevar la fiesta en paz con ella, no solo con el jugador.
Conforme con El Heraldo, en el último encuentro de la intérprete de Waka Waka con el ex jugador del FC Barcelona, la famosa no solo se mostró distante de él sino también de la española con quien siempre se le vio cercana.
Shakira ignoró por completo a la madre de Piqué pese a estar a pocos metros de distancia y en ningún momento se vio ni siquiera que le lanzara una mirada a su exsuegra, dejando ver que la separación es total.
Para muchos esto fue una sorpresa, debido a que la relación de la cantante y el deportista no tiene que incidir con el resto de los familiares, en especial en beneficio de los pequeños Milan y Sasha, de 9 y 7 años, respectivamente.
Pero parece que esto no es así. Se cree que Shakira estaría dolida porque ella después de la separación apoyó por completo a su hijo e incluso ya aceptó a Clara Chía Martí como su nueva nuera.
Esta traición hizo que la también empresaria de 45 años no quisiera seguir el contacto con ninguno de ellos, aunque por la custodia compartida con el español, sí tiene que ceder que sus hijos pasen con su familia paterna fiestas como la Navidad o la Acción de Gracias.
Todo esto impulsa a que la barranquillera quiera abandonar lo más pronto posible España, puesto que ahí no tiene amigos, muchos familiares ni aliados que estén de su bando. En Estados Unidos, en cambio, puede impulsar su carrera nuevamente y los niños gozar de más privacidad por el agobio de los paparazzi.