Dice que fue a entregarse, pero que nadie la está buscando. Mucho alboroto hubo en el país a raíz del descubrimiento de la estafa masiva para los conciertos que se conoció a raíz de los recitales de Daddy Yankee. Sin embargo, la que fue señalada como cabecilla de la banda que estafó a siete mil personas, Pamela Cabanillas, dice que no le aceptaron que se entregara en la policía. “Solo me pidieron mi número de teléfono y dirección, porque tengo notificación azul”, dijo en Panorama.
Pamela Cabanillas dijo también que no puede volver al Perú porque no tiene “dinero para comprar un boleto”. Mientras hace dinero, cobrando por saludos o promociones a conciertos y aclarando cuál es su Instagram oficial. Hay personas en redes haciéndose pasar por ella, y a propósito dice: “Dejo claro con esto que la cuenta @pamela.cabanillasoficial es fake. Si depositan para un saludo o algo, no me hago responsable”, escribió.
Ya Pamela Cabanillas no está en Italia sino que de Milán se fue a Madrid. “No tenía para comer ni para dormir, por los videos de los conciertos me pagaron 40, 50 euros que me sirven para mi alojamiento, para comer”, explicó a propósito de las promociones a los conciertos.
“No me estoy divirtiendo en Europa”
La historia de Pamela Cabanillas es una demostración más de que el crimen no paga. Dice que no tiene dinero, nada de lo que le atribuyen que estafó. “Quiero trabajar aquí en Europa, limpiando baños, limpiando carros, en lo que sea. No sería la primera peruana que trabaja aquí sin papeles”, señala.
¿Se perderá Pamela Cabanillas o la traerán al Perú? Mientras los intermediarios piden préstamos y hacen eventos para pagar a sus víctimas directas, Pamela deambula por Madrid sin nadie que la busque ni quien la detenga. ¿Se modificará la alerta de Interpol?