En mundo de los perfumes es tan amplio que lo que conocemos es tan solo la punta del iceberg. El mercado está mayormente dominado por reconocidas marcas comerciales y celebridades que deciden meterse de lleno.
Sin embargo, existe otro lado en el que los perfumes son considerados obras de arte, pues además de su exclusividad son hechos con el sentir de su creador, lo que los hace únicos e irrepetibles.
Las fragancias juegan un papel fundamental tanto en la vida del perfumista como en quien decide crear recuerdos a partir de ese olor.
Los perfumes de autor están fuera de lo comercial y en su proceso está implícito la calidad de la materia prima, el cuidado y la originalidad que lo lleva a ser algo de lujo.
Entre otras características destaca que no toman el género como un parámetro, por lo que quien se sintió identificado con el aroma simplemente lo compra. A menudo son personas exigentes y conocedoras del rubro, pues son quienes conocen realmente su valor.
Los frascos de lujo, la impecable selección de los ingredientes y la recolección de flores y plantas de manera artesanal son tan solo algunos de los detalles que elevan su costo en comparación con los perfumes comerciales.
Otra gran curiosidad de este diverso mundo es que el dinero que comúnmente se destina para grandes campañas, en este caso se usa para adquirir el más alto estándar de los ingredientes.
El costo aproximado de un perfume de autor parte desde los 100 euros y no existe un techo en su precio, aunque uno de los más conocidos es el Scandal de Roja Parfums valorado en 400 dólares.
Su creador, el perfumista británico Roja Dove ha profundizado en el alto costo de esta fragancia y reveló que un litro de aceite de jazmín cuesta 38 mil 500 euros y le toma entre 6 y 18 meses mezclarlos a mano, un minucioso proceso que sin duda infla su costo y no precisamente por especulación.
Aunque es menor la cantidad de personas que optan estos exclusivos productos, cada vez son más los que se sumergen en este lujoso mundo en busca de un aroma que los represente.