De los miles de lugares turísticos que ofrece el Perú, las piscinas del Millpu se han convertido en una de las más anheladas por los locales y visitantes.
El color de sus aguas puede variar según la estación del año pero se mantienen entre el turquesa y el verde debido a los minerales que poseen.
Aunque los turistas podían disfrutar de las heladas aguas producto de los nevados, a finales de 2019 se prohibió el ingreso a las piscinas para proteger sus vibrantes colores, pues debido a la gran cantidad de personas el polvillo que descansa en su fondo estaba enturbiando su cristalinidad. Sin embargo, en la actualidad se desconoce si la mencionada orden sigue en vigencia.
Las mágicas pozas de las piscinas del Millpu están ubicadas entre formaciones rocosas y siguen una forma escalonada que las hacen aún más paradisíacas.
Para disfrutar del Millpu al 100% se recomienda ir entre los meses de abril a noviembre para evitar las lluvias y poder disfrutar del paisaje con aguas más cristalinas.
Camino a las piscinas del Millpu
El trayecto para llegar a las piscinas del Millpu es mágico, no solo está lleno de hermosa vegetación, también es posible degustar una gran variedad de quesos y papas en el pequeño poblado de Condorcancha.
Otra de las paradas obligadas es la Catarata de Pumapaqcha, un mágico lugar ubicado dentro del circuito de ‘Cataratas Místicas’.
Hay varias formas de llegar a Ayacucho, desde Lima se puede ir por vía aérea con un recorrido de al menos un hora o terrestre de alrededor de 11 horas.
Luego hay que enrumbar un viaje de cuatro horas a Circamarca –un poblado dentro de Ayacucho- e iniciar una caminata de 20 a 30 minutos hasta llegar al destino.
Una de las cosas a tomar en cuenta es el tipo de ropa y calzado, ya que el terreno es bastante rocoso, lo cual podría hacer un poco más pesado el trayecto. La ropa ligera, el protector solar y el agua, son tres de las principales recomendaciones que debes tomar en cuenta antes de iniciar la aventura.