Perú es uno de los destinos más visitados de Latinoamérica gracias a su interesante cultura, su popular gastronomía y la gran huella inca que posee su territorio. Por otro lado, la diversidad de paisajes y el sinfín de emblemáticos lugares ha ganado popularidad con el tiempo.
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Es por eso que millones de personas al año deciden emprender la maravillosa aventura de conocer el país.
Dentro de sus grandes atributos no podemos dejar por fuera el misticismo que se percibe durante su visita no solo por las maravillas naturales, pues también cuentan con interesantes edificaciones, como es el caso de la considera iglesia más pequeña del mundo.
La también conocida como ‘Capillita del Puente’ es una de las tantas curiosidades que posee el Perú y en específico su capital. El pequeño templo de cinco metros de ancho, 10 alto y 12 de profundidad ha maravillado tanto turistas como locales.
La interesante edificación compuesta por adobe, ladrillo, madera y quincha, alberga numerosas imágenes religiosas, como la de Nuestra Señora del Rosario, San Judas Tadeo, Santa Rosa de Lima, San Hilarión, San Martín de Porres, la Virgen de la Puerta, la Virgen del Carmen y el Señor Crucificado.
El icónico templo data de 1555 pero la construcción actual se estima que pertenece al siglo XVII, época en la que un español de alto linaje llegó a Lima con el propósito de hacer vida y al mismo tiempo ser reconocido por los ciudadanos.
Así que compró un terreno en el antiguo Barrio de San Lázaro, específicamente en la calle Camino Real de Trujillo donde construyó su mansión. Sin embargo, en uno de los lados había un tambo donde se hospedaban caminantes del antiguo camino inca donde se le rezaba a la Virgen del Rosario.
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Se dice que en vista de la importante del lugar posteriormente él construyó una ermita para que los vecinos siguieran venerando la imagen de la Virgen.
La Parroquia de Nuestra Señora del Rosario está ubicada en la segunda cuadra del jirón Trujillo en el distrito de Rímac y es considerada una de las más antiguas de Lima. Dentro de su estructura se pueden ver dos altares, un confesionario, un púlpito y un coro.
Muchos de quienes la visitan entran con intriga para constatar con sus propios ojos si realmente la iglesia le hace justicia a su título como la más pequeña del mundo, pues suena insólito que su edificación cuente con las partes habituales de un templo común.
