Ashley Graham es una de las modelos más exitosas que llegó a romper con los estereotipos de belleza, dándole voz y poder a las mujeres con curvas.
La famosa comenzó en el modelaje desde el 2000, y fue en el 2007 cuando apareció por primera vez en la revista Vogue, alcanzando la fama, y convirtiéndose en un icono del “body positive”.
A través de sus redes Ashley se muestra al natural y real sin temor, presumiendo sus estrías, celulitis, rollitos, y manchas en el rostro, dando lección de amor propio.
Pero, además de empoderar a las mujeres curvy, también deja claro que es una gran mamá con sus tres hijos.
La famosa se ha dedicado a normalizar algo que lamentablemente es muy criticado en las madres, y es darles pecho a los bebés en público o mostrarlo en las redes.
Por eso, en diferentes ocasiones la famosa se ha mostrado amamantando a sus hijos, dejando claro que es algo normal y nadie debe juzgarla.
Ashley Graham normaliza la lactancia materna en público
Ashley no teme en darle pecho a sus hijos en la calle, frente a quien sea, o publicarlo en sus redes sociales.
Lo hizo con su primer hijo Isaac, y ahora, con sus gemelos Malachi y Roman, a quienes da pecho por partida doble.
A través de su Instagram, la modelo ha publicado fotos en las que se le ve amamantando a sus dos hijos, demostrando que es un proceso hermoso, natural, que crea una fuerte conexión madre e hijos.
Lamentablemente, a muchas personas aún les molesta que las mujeres saquen sus senos y les den leche materna a sus hijos en un sitio público o en redes, criticando a las madres, y Ashley no ha sido la excepción.
“Por favor esto debería ser un momento privado”, “no es necesario sacarse los pechos en público, no se cuándo entenderán”, “pero esta mujer busca llamar la atención, qué necesidad hay de publicar estas fotos”, y “sí ya sabemos que amamantas, no tienes que publicarlo”, son algunas de las críticas que ha recibido Ashley.
Sin embargo, Ashley no le presta atención a las críticas, y sigue luchando por normalizar este acto tan humano, sensible, y poderoso entre una mamá y su bebé, convirtiéndose en inspiración.