Conversamos con Omar Silva, guitarrista de Cultura Profética , la agrupación puertorriqueña que regresa a nuestro país para presentarse en el Festival Tatakunan que se llevará a cabo mañana sábado 23 en el en el Parque de la exposición.
Después de 20 años, la vigencia de Cultura Profética continúa. ¿Por qué cree que sus temas conectan tan bien con el público?
Desde que era joven, me acuerdo que una vez ‘Green Peace’ visitó el lugar donde estaba y vi un lema en una pared Think globaly and act localy (piensa globalmente, actúa localmente) y yo entiendo que Cultura siempre ha estado ligado a ese pensamiento. Nosotros vivimos en una isla con una realidad muy particular. Especialmente los tres primeros discos, diría yo, están compuestos desde nuestra perspectiva puertorriqueña que habla de esa realidad por nuestros problemas sociales y políticos. Nos representamos por quienes somos, no buscamos otros lenguajes, ni tratamos de ser europeos, por ejemplo. Sino que nos mantenemos en nuestra esencia y nuestra raíz que, de hecho, es una de las cosas que el reggae, como género, te invita a explorar, como la búsqueda de tus raíces.
Cómo han podido mezclar un género rico como el reggae con lo que hace Cultura
Nuestra fusión salió bien natural, muy orgánica. Una de las cosas que nosotros hablamos en las primeras reuniones (como banda) que tuvimos respecto del proceso creativo fue la de planteamos, para que todo el mundo siempre esté feliz con ese resultado, que cada cual era responsable de generar su música, su parte, dentro de una canción. Como músicos independientes , teníamos la responsabilidad de aportar la personalidad musical de cada uno al colectivo. Diría que eso es uno de los motivos por lo que hemos podido subsistir tanto tiempo.
En estos momentos, ¿qué significa Cultura Profética?
Música sincera eterna. Precisamente nuestro último sencillo habla de eso: música sin tiempo. No lo había pensado [risas]. Nosotros no dependemos de una moda, tiene que ver más con eso. Cuando tienes música muy llana y, como público, quieres salir de esa realidad musical, un proyecto como Cultura, sobresale naturalmente [risas].
En una industria donde prima lo comercial, cómo ha podido Cultura Profética mantenerse fiel a su estilo
Por la independencia. Somos un proyecto independiente desde el principio. Al día de hoy, no encontramos una razón para dejar de serlo. Sería genial tener a alguien que nos represente y administre esa parte de la carrera, que crea en el tipo de música que se hace pero, por lo menos en Latinoamérica, no hay ninguna con la fuerza suficiente para apoyar un proyecto como Cultura. Mejor solo que mal acompañado [risas].
¿Qué tienen preparado para el Taytakunan?
Estamos súper afilados. Tenemos un show rico rico. Haremos un pequeño repaso de nuestra trayectoria. A la gira la estamos llamando ‘Música sin tiempo’, por ahí va un poco el tema.
Haciendo alusión a la música eterna…
Claro, es que ahora hay mucha música con fecha de expiración. Una buena canción se reinterpreta, se regraba e inspira a músicos nuevos. Una canción llana, la escuchas, la puedes bailar y a los tres meses, ya estás harta y no la escuchas más [risas].
¿Qué les espera a los asistentes del Taytakunan?
Que vengan a la cita porque va a ser una fiesta grande. Estamos entusiasmados no solo del festival sino también del lugar donde vamos a tocar. Siempre que hemos ido a Perú nos hemos presentados en clubes, en lugares cerrados y ahora estamos tocando en un parque. Siempre me gusta la sensación de tocar al aire libre, así bien fresquito [risas].
Por Vanessa Cruzado
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