Las hermanas Jenner no están teniendo la mejor suerte con sus últimas campañas publicitarias en estos días. En primer lugar, el comercial de Kendall con Pepsi enfureció a millenials y activistas por tratarse de “una burla a los movimientos sociales” pero ahora, su hermana Kylie Jenner tiene al Internet con la mirada encima por un controversial anuncio con la marca deportiva, PUMA.
En realidad no se trata de una controversia por estar desnuda o por “burlarse” de algún hecho histórico, sino que la asociación de está empresaria-socialité con una marca que incentiva los buenos hábitos y el deporte, está enloqueciendo a todos. Kylie ya ha trabajado con Puma desde hace unos años, pero la agresividad de sus transformaciones ha provocado que nadie la considere una digna embajadora de marca.
En las fotos, Kylie fue alterada pues ni sus labios ni su trasero y busto se ven tan voluptuosos como en sus fotos personales. Contrario a lo que muchas veces hacen los encargados de editar las fotografías de famosas cuando les aumentan el busto o adelgazan su cintura, con Kylie parece que intentaron “normalizarla”, provocando un gran descontento en los seguidores de la marca. ¿Por qué no usar atletas reales?
“¿Por lo menos corres?”
“Su padre fue un atleta, no ella. ¿Quié pensó que esta es una buena foto? De la cabeza a los pies se ve extraña”
Y hay quienes incluso se dieron cuenta de que ni siquiera sabe pretender una pose de corredora:
“Sus pies no están flexionados, sus piernas no están a 90º ni las rodillas levantadas y su cabeza u hombros están hacia adelante”
La queja de muchos con el comercial de Kendall y Pepsi era que la chica no representa para nada a un activista ni tampoco es una joven que entienda a la generación ‘millenial’ rebelde y en busca de un cambio. La queja con Kylie y Puma es que es una joven alejada del mundo del deporte y que no es atlética sino que basa su figura en cirugías, fajas escultoras y excéntricos métodos de belleza.