JOSÉ BARRETO
¿Cómo nació la idea de hacer este festival?
Durante uno de los campeonatos de Impro que organiza Ketó, a Carlos Palma y a mí se nos ocurrió la idea de generar una movida propia de Stand Up Comedy. Pero pese a que llevamos algo más de seis años en esto con el Club de la Comedia, aún la gente no diferencia el Stand Up de otros formatos de comedia. Esta primera edición del festival está dedicado a explicar de qué se trata.
¿Cómo lo definirías?
A diferencia de la Impro, donde el artista se vale de elementos del momento, el Stand Up Comedy es escrito y no es que alguien se suba al escenario a hablar de lo que se le ocurra en el momento. El arte de esta rama del humor es crear la ilusión de que todo sale en el momento, pero detrás hay un trabajo de ingeniería del humor. Uno es el dramaturgo, actor y director de su monólogo. Otra característica es que el Stand Up permite al comediante decir lo que piensa, es y siente.
¿Qué cualidades son indispensables para hacer Stand Up Comedy?
Hay una muy importante: la sinceridad. Hay que ser muy valiente para hacer Stand Up Comedy. Bill Cosby decía, sarcásticamente, que el que alguien se pare a hacer reír a la gente era una de las profesiones más idiotas. Hacer reír es difícil… somos prácticamente los bufones del siglo XXI (risas), pero nos gusta esta locura.
¿Tomas como un reto el arrancar risas?
Totalmente. Cuando hacemos shows con el Club de la Comedia en universidades, es alucinante ver a dos mil personas reírse con un chiste que escribiste la noche anterior. Nos hemos dado cuenta de que este género gusta mucho, pero aún falta impulsarlo. Estamos estancados en términos de humor aquí.
¿Cómo así?
Por ejemplo, yo adoro a ‘Melcochita’ o al ‘Chato’ Barraza, pero ya tienen más de treinta años haciendo humor y hay que darle espacio a otros. Hay otras ramas del humor que pueden funcionar. Pataclaun lo hizo con el clown en cierto momento.
¿Qué tipo de humor se consume más en Perú?
Nos gusta mucho bromear con los defectos de los demás. De hecho tenemos muchos artistas que han basado sus carreras en poner apodos a la gente. Con el Stand Up Comedy pasamos a otro plano: el comediante habla de sí mismo. Y es genial porque así aprendemos a convivir con nuestros bemoles.
Entonces, se cambia la dinámica de hacer humor…
Así es. El Stand Up no es salir y contar un chistecito. Va más allá. Una prueba de ello es el éxito de Asu Mare. Carlos Alcántara salió a hablar de él, de su mamá, de sus complejos y mira en lo que se convirtió.
Hay un taller dentro del festival dedicado al humor en TV, ¿qué opinas de la oferta actual?
Por mucho tiempo, la TV ha impulsado un mismo tipo de humor… ese del enano que se cae o el de la vedette, un humor machista y homofóbico. Pero creo que la gente se cansó. Ya hemos visto 20 mil veces el sketch de La Escuelita, que al inicio era genial porque tenías a Esmeralda Checa, pero ahora hay una vedette que de pronto es actriz o un excantante de cumbia que es ‘cómico’. Han salido ‘actores cómicos’ de la nada, y eso particularmente me molesta.
¿Todo el mundo puede hacer humor?
Sí, pero con formación. La gente piensa que es fácil hacer esto, lamentablemente porque algunos que se dicen cómicos salen a decir ‘Meh…’ y dan risa. A qué hemos llegado. El humor es un trabajo.
¿Cuán importante es el humor en nuestras vidas?
Los peruanos necesitamos y queremos reírnos más. El humor es esencial para la vida humana…