La criolla no dudó en entonar los temas que más le gustaban al desaparecido intérprete y que, en su momento, ambos interpretaron en interminables tertulias donde la amistad era la protagonista.
En el marco musical acompañó a Lucía el cantautor Julio Andrade, quien pese a que se encontraba destrozado por la noticia no dudó en tomar su guitarra y acompañar a De la Cruz.
Los familiares del extinto cantante del “Jipi Jay” fueron embargados por la emoción del momento y agradecieron los gestos de afecto de los presentes, en su mayoría seguidores de Vásquez, que acudieron a la sede institucional de la Apdayc para presentar sus respetos.
El último hijo de Pepe Vásquez, Príamo, también llegó a esta sede para, en brazos de su madre, acompañar al féretro durante su traslado.
Su presencia provocó muestras de ternura entre los asistentes, quienes solicitaron que la ayuda para el menor sea permanente ya que quedó huérfano apenas a una semana de nacido.