Se debe en parte al entorno y a la genética. Entre los hombres hay un 50% más de zurdos que entre las mujeres y el 17% de los mellizos lo son, comparado con el 10% de la población en general.
La hipótesis del “gemelo desaparecido” dice que los zurdos eran originalmente uno de un par de mellizos de los cuales el feto del diestro no llegó a desarrollarse.
La dominancia del cerebro también parece ser una razón.
La mayoría de la gente es diestra y el lenguaje, en ellos, está controlado por el hemisferio izquierdo. En la mayoría de los zurdos se da el caso contrario.
Sin embargo, algunos zurdos procesan el lenguaje en el hemisferio izquierdo o en ambos.
La base genética es más complicada. Incluso cuando ambos padres son zurdos, hay un 26% de probabilidades de que el hijo sea zurdo.
Si uno tiene el gen LRRTM1 aumentan las probabilidades, pero sólo si uno hereda el gen por parte del padre.
Pero si uno se vuelve zurdo o no depende también del desarrollo.
Puede verse influenciado por los niveles de testosterona o estrógeno durante el embarazo y las experiencias de niño agarrando y lanzando objetos.
Y, finalmente, daños en la mano derecha pueden hacer que la gente se vuelva zurda.