El joven artista publicó en su página de Twitter un número de teléfono sin sus dos últimos dígitos e instó a sus seguidores a que lo llamaran de inmediato.
No obstante, mientras sus fans intentaban llamar al número correcto, dos residentes en Texas afirmaron que fueron abrumados con más de mil llamadas, a pesar de que el número fue rápidamente eliminado.
El representante legal de la pareja afectada, Kent y Dilice, exige una compensación por los problemas causados por la broma. Y además de la recompensa monetaria, también solicitan un aval para el próximo proyecto web de Kent.
Por otro lado, Justin espera que la acción legal no le cueste demasiado ya que recientemente ha adquirido una mansión por valor de seis millones de dólares en California.