Por Carlos Lázaro
Ángela Leyva se inició en el vóley a los 11 años gracias a su talla (hoy tiene 1,82 m). Era la niña más alta de su colegio y su profesor de Educación Física no dudó en incluirla en el equipo de vóley. Luego de unos meses se descubrió el talento que escondía la ahora capitana de la selección peruana de vóley, quien se convertirá este sábado en mayor de edad. Ángela inició su etapa formativa en el club Camino de Vida de Chorrillos y luego fue fichada por la San Martín. Publimetro habló con ella sobre la salida de Natalia Málaga de la selección mayor, su presente y su futuro ante la net alta.
¿Cómo calificarías este año que está por culminar?
He aprendido muchas cosas. Como todo deportista he tenido mis bajones anímicos, pero Dios y mi familia estuvieron en esos momentos para apoyarme. Creo que en el 2013 a nivel de selección me fue mejor por la medalla de oro en el Sudamericano Sub 18 y el cuarto lugar en el Mundial de Tailandia. Pero tengo que resaltar el salto dado de juveniles a mayores.
¿Cuán complicado fue para ti y tus compañeras disputar partidos contra selecciones mayores?
Fue difícil porque enfrentábamos a voleibolistas experimentadas, pero no teníamos presión. Dimos lo mejor de nosotras en cada encuentro del Grand Prix, que se jugó en Perú y Argentina, y en los Panamericanos de México. Hay que considerar que estaremos en la categoría Sub 23 todavía cuatro años más.
¿Qué sentiste al ser elegida capitana del equipo mayor y convertirte en la más joven de toda la historia?
Me sentí muy feliz. Tuve el apoyo de todas mis compañeras, que afirmaron que yo era le persona indicada para comandar el grupo. Creo que Natalia (Málaga) me tiene bastante confianza.
Natalia Málaga afirmó que la selección tenía un problema mental, que bajaba su nivel debido a este aspecto, ¿a qué crees que se deba?
Muchos dicen que es por nuestra edad, pero no creo que sea el factor principal de nuestro desempeño. Los partidos no son iguales, los rivales varían y su juego también. Debemos acostumbrarnos a disputar encuentros con selecciones de primer nivel. Somos jóvenes, pero tenemos objetivos como personas mayores.
Se confirmó que Natalia no seguirá a cargo de la selección mayor. ¿Cómo tomaste la decisión de la entrenadora?
Ella nos apoyará hasta fin de año, pero a partir de enero empezará a trabajar solo con las menores, donde está mi hermana Leslie. Ella ha manejado de la mejor manera muchas dificultades con nosotras y con el público. Estuvo a cargo de una selección mayor que estaba integrada por juveniles y lo ha hecho de manera extraordinaria. Vamos a extrañar mucho a Natalia, porque ella es como una madre y amiga dentro y fuera del campo.
El vóley peruano se encuentra un peldaño abajo de las potencias mundiales, ¿qué necesitamos para poder alcanzar ese nivel?
Tenemos que ir paso por paso. La selección mayor es representada por juveniles, seis jugadoras tenemos 18 años y dos entre 15 y 16 años. Creo que si el grupo sigue comprometido por mejorar en cada entrenamiento, los resultados se verán en unos pocos años.
¿Cómo se están preparando para el próximo Mundial Sub 20 de Chipre?
En julio jugaremos este torneo y antes participaremos en el Panamericano de República Dominicana y el Grand Prix, que nos ayudará a encontrar un nivel mundialista. Buscaremos la medalla de oro, porque nos quedamos con la desazón del cuarto lugar en el Mundial Sub 18 del 2013.
La Liga Nacional de Vóley se inicia el 26 de noviembre, ¿a qué aspira la San Martín?
Tenemos un buen equipo y vamos por el título. Hay buenos rivales, pero podemos campeonar otra vez. Además nos servirá de preparación para el Sudamericano de Clubes, que se realizará el próximo año en Brasil.
¿Cuál es tu objetivo principal en unos años?
Quiero jugar en una liga del extranjero y seguir creciendo como deportista. También espero poder representar al Perú en unos Juegos Olímpicos.