El uruguayo Luis Suárez jugará el miércoles (19h45 GMT) en Ámsterdam su primer partido de Champions con el Barcelona ante el Ajax, que le dio a conocer en Europa, y por respetar ese recuerdo si marca no lo celebrará, pese a ser su primer tanto como azulgrana.
“Mañana si marco me encantaría desahogarme, pero por respeto a este club y a esta ciudad no lo celebraría”, afirmó el delantero, que solo ha podido disputar dos partidos con el Barça esta temporada a causa de la sanción impuesta por la FIFA por morder al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial.
“Es un partido especial, me trae lindos recuerdos volver a este estadio, con la gente que tanto cariño me ha dado”, añadió Suárez sobre su vuelta a Ámsterdam, donde jugó entre 2007 y 2010 marcando más de cien goles.
“El Ajax me enseñó a crecer y muchos conceptos que yo no tenía”, afirmó sobre los recuerdos que guarda de su paso por Holanda.
En su nuevo club, no atraviesa un buen momento por los malos resultados del equipo, que suma dos derrotas consecutivas (Real Madrid y Celta de Vigo) y no despeja las dudas que suscita su juego.
“En el Barcelona siempre estás obligado a ganar todos los partidos (…) debemos demostrar ahora que estamos capacitados de revertir la situación”, afirmó Suárez.
Muchas de las críticas se están centrando en el nuevo entrenador, Luis Enrique, al que se le acusa de haber cambiado el estilo de juego que ha caracterizado al Barça de los últimos años.
“El entrenador tiene una forma táctica y el equipo se tiene que adaptar. Yo mismo tácticamente no me encontré bien, pero a medida que pasan los partidos me iré encontrando mejor”, afirmó Suárez.
El uruguayo también apunto que uno de los caminos es la autocrítica pese a que “perder dos partidos seguidos no es normal” y considera una “casualidad de que haya vuelto a jugar y los dos partidos se hayan perdido”.
Sobre su rendimiento y adaptación con su nuevo equipo, con el que no pudo realizar una pretemporada adecuada debido a que la sanción inicial de la FIFA le impedía entrenarse, también aseguró que nota la mejoría.
“Al principio me sentía raro, ahora ya me he adaptado, me siento bien. Estoy agradecido por cómo me han recibido”, explicó.
En el césped de Amsterdam se alineará junto al brasileño Neymar y el argentino Lionel Messi, “el mejor del mundo” sin discusión, según el uruguayo.