Metamemorias, obra de Alan García, se lanzará como audio libro

Tras cumplirse un año del fallecimiento del expresidente Alan García, Editorial Planeta anuncia próximamente el lanzamiento del audio libro de su su obra póstuma Metamemorias (1949-2019). Asimismo, esta casa editorial también ha adelantado que habrá un libro de ensayos escritos por políticos, expresidentes de América Latina, periodistas y miembros de su familia (incluida su pareja Roxanne Cheesman). Esta selección será trabajada por Carla García, hija del exmandatario.

Como se recuerda, el 17 de abril de 2019, los medios más importante del mundo anunciaban la muerte de Alan García. El líder aprista había escrito varios textos horas antes de su muerte, los cuales fueron publicados de manera póstuma en Metamemorias, un libro que no solo ha sido uno de los más vendidos en los últimos cinco meses desde su lanzamiento, sino que también está entre los ebooks más buscados, especialmente ahora en la cuarentena.

En esta obra, García habla sobre su vida personal y su trayectoria política. Como se sabe, él asumió la Presidencia del Perú con 35 años de edad. Era el año 1985 y el líder aprista llegó al poder luego de que el exalcalde de Lima Alfonso Barrantes, quien iba en segundo lugar en votación, renunciara para ir a una segunda vuelta. Regresó al poder en el 2006.

Precisamente en sus memorias, el ex jefe de Estado narra diferentes momentos de su vida, que van desde lo familiar, como la relación que mantuvo con su padre, hasta su desarrollo en el partido aprista. Para él, su progenitor y algunos otros familiares fueron fundamentales en su evolución política.

García se refiere a su padre, quien sufría de presión arterial, como un hombre sereno y reservado. Precisa que era una persona cuyas emociones reprimía: ‘¿Cómo pudo entregar ocho años a la cárcel, cuatro al destierro y cuatro a la clandestinidad, sin ninguna opción inmediata? Nunca me lo dijo’.

García cuenta, además, entretelones del partido que lideraba. ‘Con miles de apristas presos o desterrados, y muchos más en la clandestinidad, se fue formando una conciencia religiosa del deber histórico. Ese espíritu es el que alimentó, decenios después, mis horas más difíciles, haciendo analogías con cada momento catastrófico o de triunfo’.