Tras el asesinato de la modelo venezolana Jennifer Ramírez Rivero, quien fuera hallada con señales de haber sido torturada en un edificio en Cúcuta, Colombia, autoridades locales confirmaron que su pequeño hijo tendrá una madre sustituta.
El menor, que pasó cinco días al lado del cadáver de su madre, permanece bajo observación médica en el Hospital Universitario Erasmo Meoz de la capital nortesantandereana.
Tras el hallazgo del bebé, se comprobó que padecía de un cuadro severo de desnutrición, y posteriormente, su custodia quedó bajo el cuidado del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, que tomó la decisión de asignarle una madre sustituta luego de que fuera trasladado al complejo hospitalario por una dermatitis a la altura de su rostro.
La infección cutánea del menor habría sido contraída porque el bebé pasó mucho tiempo durmiendo junto a los restos su madre, que llevaba varios días de muerta.
La modelo era natural de la ciudad de San Cristóbal, capital del estado fronterizo del Táchira (Venezuela).
“El trabajo que se tiene que hacer por parte de las autoridades es psicosocial, pues el niño debe estar atravesando por una ausencia de la figura materna y quizás esto desarrolle una sensación de soledad a futuro. También se debe someter a terapia la familia para que si en algún momento el menor revive la escena se tengan claras las herramientas para afrontar el momento”, señaló Marta Beatriz Ramón Lara, psicóloga clínica.
La modelo venezolana Jennifer Ramírez fue encontrada muerta el pasado lunes 20 de agosto en Cúcuta, Colombia. Cinco días después de su fallecimiento, los vecinos dijeron a las autoridades que fuertes olores emanaban del departamento de la mujer.
Con información de El Tiempo.
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