Emprendimiento: Cómo iniciar un negocio con bajo presupuesto

Nuestro país ocupa el cuarto lugar en Emprendimiento en América Latina, según el Global Entrepreneurship Monitor (GEM). De acuerdo con este reporte, 25 de cada 100 peruanos se encuentran involucrados en algún tipo de actividad emprendedora.

Sin embargo, abrir tu propio negocio no es tan simple. Mantenerte vigente en el mercado es una tarea incluso más complicada, sobre todo si no se cuenta con un respaldo financiero importante.

En ese sentido, Renzo León Velarde, gerente general de la empresa de facturación electrónica Digiflow, comparte tres recomendaciones para abrir tu negocio propio sin grandes cantidades de dinero.

1) Diseña un buen plan de negocios

Este es el documento guía para tu emprendimiento. Antes de embarcarte en esta aventura debes planificar muy bien cada paso. Este plan puede ser elaborado por ti mismo con mucho cuidado y debes considerar información clave: cuánto costará brindar tu producto o servicio, cuánto cobrarás por él, qué te diferencia de la competencia, quiénes son tu público objetivo, quiénes conformarán tu equipo de trabajo, en cuánto tiempo se incrementará el volumen de tu negocio y en cuánto tiempo recuperarás tu inversión inicial.

2) Aprovecha tus recursos

Indistintamente del rubro al que se dedicará tu negocio, debes aprovechar al máximo los recursos con los que ya cuentas. Por ejemplo, puedes usar los ambientes de tu casa antes de alquilar o comprar un espacio propio. Esto significará un gran ahorro.

3) Publicidad sin gastar en exceso

Gracias a Internet y las redes sociales puedes publicitar tu empresa gratuitamente o con muy poco presupuesto. No obstante, el primer paso siempre debe ser compartir la información sobre tu negocio con tu entorno más cercano, como familiares y amigos, y pedirles que te ayuden a difundirla. Recuerda que la recomendación boca a boca siempre es una de las mejores formas de ampliar la cartera de clientes, además, de ser la más económica.

Tres posibles emprendimientos con poco capital

1. Una tienda por Internet o redes sociales. Puedes trabajar a pedido y así no gastar en un gran stock. Tampoco necesitarás alquilar un local.

1. Comida saludable para oficinistas. Cocinar en tu propia casa y hacer el delivery en bicicleta te ahorrará los costos de alquiler y envío.

1. Taller de baile/yoga. Si te gustan las artes escénicas o actividades que exijan ejercicio físico, puedes montar tu propio taller en casa. No hace falta que inviertas demasiado en infraestructura.

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