La Oficina de la Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en el Perú dio la bienvenida al debate sobre el uso medicinal de la marihuana en el tratamiento de enfermedades graves y terminales y consideró que esa posibilidad es válida.
El representante de la institución en el Perú, Kristian Hölge, afirmó que de ninguna manera se contraviene la palabra o el espíritu de las convenciones internacionales. “Todo lo contrario. En su esencia, los tratados de fiscalización internacional se preocupan por la salud y el bienestar de la humanidad. La salud es un derecho’.
Añadió que los estupefacientes son indispensables para aliviar el dolor y el sufrimiento relacionado con las enfermedades. “Es por ello que deben estar disponibles para fines médicos y científicos”, recalcó al señalar que ponen su pericia a la disposición del gobierno peruano.
Hölge adviertió que es clave distinguir entre el uso de medicamentos científicamente aprobados y el uso de marihuana ‘medicinal’ como escudo para legitimar el consumo general del cannabis.
La comunidad científica, el mundo académico y el sector privado desempeñan un rol significativo en el suministro de datos y evidencias científicos, finalizó.