El gobierno de Noruega presentó el viernes un proyecto de reforma que autoriza a una persona a cambiar oficialmente de sexo sin llevar a cabo ninguna operación, tratamiento hormonal o esterilización, una decisión “histórica” según Amnistía Internacional.
El ministro de Salud noruego propone que “las personas que deseen cambiar legalmente de género ya no tengan que hacer un tratamiento médico” para volverse oficialmente un hombre o una mujer.
“Noruega está en la vanguardia en materia de defensa de los derechos de los LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales), pero las disposiciones vigentes sobre el cambio legal de género no han cambiado desde hace 60 años y son inaceptables”, indicó Bent Høie en un comunicado.
Se trata de un proyecto de ley “histórico porque de ahora en más corresponde a la persona y no a los servicios de salud decir cuándo él o ella cambió de género”.
Como en muchos países del mundo, la gente que quiere cambiar oficialmente de sexo en Noruega tiene que llevar a cabo largos y complicados trámites que suelen durar unos 10 años. Tienen que someterse a un examen psiquiátrico, a un tratamiento hormonal y a una intervención quirúrgica que incluye una esterilización irreversible.
El proyecto de ley prevé que “toda persona que considere que su género difiere del que se le ha dado cuando nació tiene derecho a cambiarlo en base a su propia percepción”.
Para ello, bastará con llenar un formulario dirigido a la administración fiscal, que tiene a su cargo el estado civil en Noruega.
“Es el mismo trámite que para cambiar de nombre vigente desde 2008. Hasta se puede hacer con un clic por internet”, indicó a la AFP Ingvild Endestad, portavoz de la asociación LGBT noruega.
Amnistía también calificó de “histórico” el anuncio del gobierno e instó a los parlamentarios a votar la reforma y así “terminar con décadas de prácticas discriminatorias”.
De adoptarse el proyecto de ley, la edad mínima requerida para pedir un cambio de estado civil pasará de 18 a 16 años, sin autorización previa de los padres.