A partir de mayo próximo se aplicaría por primera vez en el Perú el sistema de grilletes electrónicos a personas procesadas y a internos de los penales con condenas menores de ocho años, lo que ayudará a disminuir el hacinamiento en las cárceles.
Así lo adelantó a Andina el jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Julio Magán, al señalar que se espera firmar el contrato con el consorcio ganador de la buena pro de la licitación en el mes de abril y comenzar a aplicar el sistema de vigilancia electrónica desde mayo.
Para que el sistema se ponga en funcionamiento, el INPE y el Poder judicial deben armonizar sus protocolos, proceso que ya ejecutó la entidad penitenciaria.
La aplicación de grilletes a procesados y sentenciados, según Magán, ayudará a descongestionar los penales al alcanzar a un 5% de los internos aproximadamente, lo que representa entre 3,500 y 5,000 personas.
El piloto se desarrollará en Lima y Callao y cada interno que quiera acogerse a ese beneficio deberá pagar su propio sistema de vigilancia electrónica, lo que representará un gasto de unos cinco dólares diarios, tanto por la instalación del sistema, el alquiler de los grilletes y el servicio de monitoreo.
Magán explicó que podrán acceder a este beneficio las personas a las que se les abre un proceso penal con prisión preventiva. En vez de ir a un penal, esa persona puede solicitar al juez la comparecencia con el uso de grilletes electrónicos mientras dure su proceso y de esa manera se evita aumentar la población penal.
También podrán acogerse aquellas personas que ya están en prisión preventiva, señaló el funcionario.
Los sentenciados
Este sistema podrá alcanzar también a aquellos sentenciados que tengan la posibilidad de pedir beneficios penitenciarios y que tengan hasta ocho años de condena.
“Será el juez el que evalúe si se le puede conceder este beneficio a determinada persona y si solo se le permite mantenerse dentro de su vivienda o tendrá la posibilidad de salir a estudiar o trabajar”, precisó el titular del INPE .
Anotó que el proceso de la entrega de la buena pro y la firma de contrato está a cargo de Proinversión y que la supervisión la efectúa el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
Monitoreo electrónico
Al interno que reciba este beneficio se le colocará el grillete (que tiene forma de pulsera) ya sea en la muñeca o en el tobillo. Además en su domicilio se debe hacer una instalación de cableado para que el sistema pueda operar.
Con estos implementos, la persona será monitoreada desde una central para vigilar si respeta o no las normas establecidas en cada caso, es decir si no abandona el perímetro que la autoridad judicial le ha asignado para permanecer
“En caso eso sucediese, la empresa operadora del servicio está obligada a comunicarnos a nosotros (al INPE) y al juez para que tome la medida correspondiente”, señaló.
Actualmente, la población penal del país es de 77,348 internos y la mayoría de penales presentan hacinamiento, siendo el de situación más crítica el de Jaén por cuanto está diseñado para 50 personas pero alberga a 325, lo que representa una sobrepoblación de 550%.
En tanto, el penal del Callao (Sarita Colonia) tiene una capacidad de albergue para 572 personas, pero actualmente tiene registrado a 3,296.
En cuanto al penal de Lurigancho , sus instalaciones pueden mantener a 3, 204 pero allí actualmente se encuentran 9,846 reclusos.