Este diamante extraído en una mina de Botsuana tiene 1.111 quilates.
Es el más grande desde hace más de un siglo y el segundo más grande de la historia.
La piedra incolora tiene el tamaño de una pelota de tenis.
Todavía no ha podido determinarse su valor, pero por la mañana la acción de la minera canadiense Lucara, responsable del hallazgo, subían un 34 % en la bolsa de Estocolmo.