Este viernes es un día muy especial para Felipe Gorordo: por fin viaja a Cuba acompañando a su madre, quien regresará a la isla comunista por primera vez en 46 años tras migrar a Miami.
Ellos son parte de un grupo de 200 peregrinos que van a ver al papa Francisco
‘Lo que le impulsó a mi madre para volver a Cuba después de 46 años, primero, fue un deseo de reconectar con sus raíces, y creo que después de verme viajar tantas veces y tener un hijo que se convierte en el puente entre su familia aquí y allá, ella quería viajar’, señala Felipe.
Felice piensa que su madre quiso volver a la isla para no desperdiciar una oportunidad valiosa, especialmente tras ser diagnosticada de un cáncer de páncreas.
Es por eso que viajan inmersos en el espíritu de reconciliación que el Francisco ha pedido a los cubanos.
‘Creo que vamos a esta experiencia con el corazón y la mente abiertos, tal como el santo padre nos ha pedido’.
Mientras miles de cubanos esperan con la ciudad a punto la visita de tres días del papa argentino.