No se metieron la juerga de sus vidas, ni fueron víctimas de las temibles peperas. Sin embargo, los pobladores de Kalachi, en Kazajistán, suelen quedarse dormidos sin razón aparente y, en muchas ocasiones, durante varios días.
Según informes del diario ruso “The Siberian TImes” los durmientes pueden permanecer en las redes de Morfeo durante varios días. Estos extraños casos se registran desde 2010.
Expertos del tema trabajan al respecto para obtener información del terreno, recogiendo muestras para analizarlas, ya que ciudadanos de dicho pueblo están decidiendo abandonar sus casas para evitar sufrir este problema.
Las últimas investigaciones han revelado que el pueblo registra niveles de monóxido de carbono más altos de la media, lo que podría ser un factor a considerar. La situación geofísica de Kalachi también provoca un efecto chimenea por el que los humos contaminantes no suben a la atmósfera, sino que experimentan un efecto de caída hacia abajo, según explica uno de los científicos responsables de la investigación a “The Siberian Times”.