El Airbus A320 de Germanwings despegó de Barcelona con destino a Dusseldorf a las 10H00 hora local con 144 pasajeros y 6 tripulantes a bordo.
Atravesó el mar Mediterráneo y alcanzó una altitud crucero de 10.000 metros a las 10H22.
A las 10H30 y a 11.400 metros, los controladores aéreos de Aix-en-Provence pasaron a encargarse del vuelo.
Indicaron al piloto mantener el nivel de vuelo y contactarlos más tarde. El piloto confirmó.
Según la grabación de la caja negra, el comandante de a bordo salió de la cabina dejando al copiloto a cargo.
A las 10H31, el avión comenzó a descender sin autorización. Los controladores intentaron establecer contacto pero no obtuvieron respuesta. La caja negra reveló que el copiloto activó el descenso del aparato.
El avión continuó bajando y el control aéreo emitió un alerta a las 10H35. A las 10H40 y a sólo 2.000 metros de altitud, la aeronave desapareció de los radares.
El comandante intentó forzar la puerta de la cabina sin éxito. La caída duró 8 minutos.
El avión se estrelló a 700 km/h en los Alpes franceses, a 1.500 metros de altura.