La Municipalidad de San Isidro paralizó esta mañana cinco obras en la zona que mantiene en litigio con el distrito vecino de Magdalena del Mar, comprendida entre las avenidas Del Ejército, Salaverry, Sánchez Carrión (Pershing) y la calle Juan de Aliaga.
La gerenta de Fiscalización de San Isidro, Gabriela Zúñiga, señaló que las edificaciones están en suelo sanisidrino, pero que no tienen licencia de construcción concedida por su municipio, sino por las autoridades de Magdalena del Mar.
‘No solo no cuentan con la autorización de San Isidro, sino que van en contra de los parámetros urbanísticos’, le dijo a Publimetro Zúñiga, funcionaria que ha ingresado con el nuevo alcalde Manuel Velarde.
Así, explicó que los edificios paralizados están destinados a ser centros empresariales pero, según la zonificación del terreno, ese tipo de construcciones no están permitidas en esa zona residencial.
Además, Zúñigaa indicó que algunas de las obras superan la altura máxima permitida. ‘En la avenida Javier Prado, por ejemplo, solo se admiten edificios de máximo 15 pisos y hay una construcción de más de 17’.
Desde Magdalena del Mar, su alcalde, Francis Allison, aseguró que las obras sí son legales, ya que están asentadas en su jurisdicción.
Al respecto, explicó que dos resoluciones emitidas por el Instituto Metropolitano de Lima (IMP), en los años 1997 y 2000, ratifican que esa zona le pertenece a Magdalena del Mar y no a San Isidro.
También aludió a una resolución del Tribunal Constitucional (TC) del 2004 que establece que las licencias de construcción o de funcionamiento otorgadas por Magdalena en esa zona son válidas.
‘Creo que el alcalde (de San Isidro) Velarde desconoce esa sentencia, pues tiene menos de 30 días en la gestión. Estoy seguro que como hombre de derecho sabe que debe respetar las resoluciones del TC’.
Allison llamó a Velarde al diálogo y le pidió dejar sin efecto su decisión. Sin embargo, Zúñiga dijo que esta situación no pasa tanto por una cuestión de conciliación como de ‘respeto’ por los limítes establecidos.
Esta mañana, personal de la Municipalidad de San Isidro impidió el ingreso de los trabajadores a estas cinco obras. Zúñiga explicó que, para poder reanudarlas, las empresas constructoras deberán tramitar ante San Isidro su licencia y adaptar sus proyectos para obtener la autorización. Además, otras dos obras han quedado en proceso de paralización.