La presidenta del Congreso, Ana María Solórzano, descartó ayer que exista una intención política de dilatar el debate de la moción de censura contra el ministro de Justicia, Daniel Figallo.
Como se recuerda, esta moción fue presentada el pasado miércoles por el interés indebido de Figallo al caso del prófugo Martín Belaunde Lossio. ‘En este momento tenemos una censura presentada que no ha cumplido un requisito que el propio Reglamento dice (…) Nadie pone ningún obstáculo a ninguna herramienta de control político, como es la interpelación o la censura, pero respetemos el Reglamento’, aseveró.
Sin embargo, el día lunes, la presidenta en el Parlamento brilló por su ausencia. La oposición esperó que Solórzano anunciara la convocataria de una sesión extraordinaria del Pleno para debatir la moción de censura.
Ante ello, Mauricio Mulder de Concertación Parlamentaria indicó que Solórzano tiene hasta este domingo para convocar a la sesión. De no hacerlo, el lunes 22 presentarán una moción de censura contra la Mesa Directiva. Mulder señaló que el tema no se tocó por orden del presidente Ollanta Humala.
Por su parte, Héctor Becerril de Fuerza Popular, anunció que presentarán una acusación constitucional contra Solórzano por no haber extendido la última legislatura.
Como se sabe, la próxima legislatura del Congreso se inicia en marzo del 2015.