La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, defendió ayer ante el Congreso de su país, en su primer rendimiento de cuentas público, la reforma educativa, tributaria y constitucional ante las dudas del empresariado y las críticas de la derecha.
‘Quiero ser clara en este punto: durante mi gobierno haremos estas transformaciones y lo haremos con gobernabilidad, paz social, de manera democrática y transparente’, dijo la mandataria.
Bachelet salió a defender la reforma educativa que busca disminuir la desigualdad y fijar las bases del crecimiento en Chile, así como acabar con la selección, el lucro y el cofinanciamiento en las escuelas subvencionadas.
También reivindicó la reforma tributaria que busca recaudar 8.200 millones de dólares para financiar el cambio del sistema educativo, que el empresariado considera una amenaza a la inversión y el crecimiento de una economía en desaceleración. En su discurso, que se prolongó durante dos horas, la presidenta también aseguró que propondrá la despenalización del aborto por violación, riesgo de la madre o inviabilidad del feto.
Salen a las calles Miles de estudiantes chilenos, junto a trabajadores y ecologistas, marcharon en rechazo a la reforma educativa propuesta por Michelle Bachelet, mientras la mandataria rendía cuuentas en el Congreso.No creen. Los estudiantes desconfían que la reforma educativa vaya a satisfacer sus demandas de educación gratuita y de calidad.