En abril próximo se iniciará el enmallado del acantilado de la Costa Verde desde San Isidro hasta Chorrillos, con lo cual se evitará el desprendimiento de piedras como el ocurrido ayer en Miraflores, producto del cual un menor de tres años quedó en estado de coma.
Tras lamentar este hecho, el presidente de la Autoridad Autónoma de la Costa Verde (AACV), Gustavo D’ Angelo, precisó que los trabajos no se pueden iniciar antes, debido a la gran afluencia de público que acude a las playas de la Costa Verde durante esta temporada de verano.
Sumado a ello, dijo, obras de esta envergadura se ejecutan por partes. El primer tramo, explicó, que contempla los distritos de San Miguel y Magdalena se inició en invierno, y ya están por culminar bajo la responsabilidad de la Empresa Municipal Administradora de Peaje de Lima (Emape).
“Lamentablemente este accidente ha ocurrido antes de abril. Los trabajos durante ese mes comprenden las obras de enmallado en los distritos de San Isidro, Miraflores, Barranco y Chorrillos”, manifestó a la Agencia Andina.
El enmallado contempla la colocación de una malla gruesa que “empaqueta” todo el acantilado de arriba a bajo; y luego se procede a la siembra de una hiedra trepadora (producto ecológico) que crece en todo el acantilado y se aferra a la malla, otorgando una doble protección.
No obstante, D’ Angelo aclaró que la malla protege de pequeños deslizamientos, y no como los deslizamientos masivos ocurridos en los años 40, cuando se desprendió una gran parte del acantilado en Chorrillos.
Por ello, recordó, en el 2010 se declaró como zona intangible todo el acantilado para evitar, por seguridad, construir sobre él. Cuestionó que, a pesar de esta declaratoria, inmobiliarias construyan ahí sin respetar las normas y amparándose en recursos o en concesiones otorgadas por algunos municipios.
El titular de la AACV adelantó que en este contexto conversará con las autoridades de Emape para evaluar la posibilidad de adelantar los trabajos de protección del acantilado programados para abril.
En la víspera, un niño de 3 años quedó en estado de coma luego de que una piedra le cayera en la cabeza desde el acantilado frente a la playa Waikiki, en Miraflores, cuando viajaba en un auto por la Costa Verde. La roca ingresó a la unidad por el lado derecho del asiento trasero donde estaba sentado el niño.
En el vehículo también viajaban su hermano y su padre, Diego Orellana Montoya, quienes se dirigían a La Perla, en el Callao, para visitar a un familiar.
El menor fue conducido a una clínica local y tuvo que ser operado de inmediato. Sus familiares indicaron que el pequeño está en coma y que su estado es de pronóstico reservado.