El expresidente, Hosni Mubarak, fue sacado hoy de la cárcel en un helicóptero. Una decisión que para muchos podría generar nuevos conflictos sociales y que representaría una victoria simbólica para el antiguo orden dominado por el Ejército egipcio.
Durante el traslado de la prisión de Tora, en El Cairo, decenas de seguidores se congregaron para celebrar su liberación. Mubarak, que gobernó por más de tres década, fue trasladado a un hospital militar en el suburbio cercano de Maadi, declararon funcionarios.
Su abogado y otras fuentes dijeron más temprano que su principal destino será un lujoso hospital en el noreste de El Cairo.
Esta decisión fue tomada en un ambiente cargado de violencia, debido a los desalojos perpetrados por la policía en campamentos de protesta montados en El Cairo por seguidores de los Hermanos Musulmanes de Mursi para demandar que sea restituido en el cargo.
Según fuentes oficiales, unas 900 personas, entre ellas 100 soldados y policías, han muerto desde la semana pasada en Egipto, en el episodio más sangriento de la historia moderna del país como república.