Los niveles de corrupción en el Perú, pese a los recientes intentos del gobierno, aún mantienen un índice elevado, según el octavo Barómetro Global de la Corrupción realizado por el organismo Transparencia Internacional.
El estudio correspondiente al periodo 2012 – 2013, con una muestra de 114.300 ciudadanos de 107 países, revela la percepción de la extensión de la corrupción en las instituciones. En esta escala de percepción (1, nada grave; 5, muy grave), el Poder Judicial (4,4) encabeza la lista en el Perú seguido de cerca por los Partidos Políticos (4,3), el Congreso (4,3) y la Policía (4,3).
El Perú es el único país de toda América (14 países incluidos) en el que el Poder Judicial es percibido como la institución más corrupta. En el resto de países encabezan los partidos políticos.
Pero el Barómetro, además de las percepciones, recoge la experiencia ciudadana respecto al pago de coimas. Sobre las ocho instituciones o servicios públicos analizados, el 44% de encuestados en el Perú señala que pagó coimas a la Policía, el 32% en el Poder Judicial, y el 13% para tramitar registros y permisos.
Las razones detrás del pago de sobornos son reveladoras: la más recurrente refiere a la agilización de trámites (43%), seguida de asegurar que estos culminen con éxito (34%). Ambos casos revelan lentitud en los procesos burocráticos y la sensación de incertidumbre en la población.
En cifras generales, un 20% de peruanos reportó haber tenido que pagar una coima al realizar el trámite en alguna de las ocho instituciones nombradas (se incluyen servicios públicos, de salud, educación, pago de impuestos y registros).
Este índice ubica al Perú, en una situación intermedia entre los 14 países evaluados de América: Bolivia y México son los países que registran las tasas más altas en pago de coimas (36 y 33%), mientras Canadá y Uruguay (3%) las más bajas.