“Estos ciudadanos, por orden fiscal, han sido devueltos a Perú, que ha sido el lugar de tránsito por donde han ingresado” subrepticiamente a territorio boliviano, dijo Estenssoro a periodistas.
Tras su expulsión de Bolivia, “Perú tiene que encargarse de llevarlos hacia Ecuador, porque ha sido el último lugar de admisión irregular”, explicó la funcionaria.
Los emigrantes africanos, de entre 17 y 44 años de edad, habían sido descubiertos en dos hospedajes de La Paz en condiciones de hacinamiento, informó previamente el fiscal Javier Monasterios.
Según las primeras pesquisas, los 44 senegaleses iban a ser trasladados hacia el departamento sureño boliviano de Tarija, frontera con Argentina y Paraguay.
Entre los detenidos, sospechosos de tráfico de personas, figuran bolivianos, peruanos y cuatro senegaleses.
Las investigaciones apuntan a “encontrar a las cabezas de esta red (de tráfico humano) que involucra a otros países de la región”, apuntó Estenssoro.