¿Que sucederá el 10 de enero? ¿Habrá posesión presidencial? ¿De quién? Son las preguntas que todos se hacen, desde el más humilde vendedor ambulante hasta el más alto funcionario del país.
Tras el anuncio que hizo ayer el gobierno, a través de una carta del Vicepresidente y Canciller Nicolás Maduro de que Chavez “no estará” en el acto de asunción presidencial de mañana debido al complejo post operatorio que presenta, la incertidumbre política con la que Venezuela inició el año aumenta cada vez más.
En la misiva, también solicitan, a nombre de Chávez, que le permitan posesionarse ante el Tribunal Supremo de Justicia, sin fecha especifica. Ya que la Constitución no precisa fecha de asunción ante este organismo, y además no dice que aquel día será impostergable.
Ante esta sorpresiva postura del oficialismo, y mientras más horas pasan, se barajan variadas interrogantes y posibles escenarios políticos que enfrentar. Ya sabemos que Chávez no se juramentará mañana como presidente electo, pero a quién le toca ocupar ese cargo.
Para dilucidar un poco el panorama debemos leer cuidadosamente la Constitución venezolana.
La Carta Magna dice que el presidente electo debe juramentarse ante la Asamblea Nacional. En caso de “falta absoluta” (muerte, renuncia, destitución o incapacidad física o mental permanente certificada por una junta médica ordenada por el Tribunal Supremo de Justicia y avalada por la Asamblea Nacional) se procederá a una nueva elección en 30 días. Y es el presidente de la Asamblea quien llamará a nuevos comicios y quedara a cargo de la Presidencia.
Sin embargo, qué sucede si la ausencia del presidente reelecto no es absoluta, sino temporal. En el artículo 234, la Constitución señala que la falta temporal será suplida por el Vicepresidente, hasta por noventa días prorrogables por decisión de la Asamblea Nacional por un lapso igual. Si la falta temporal se prolonga por más de ese lapso, la Asamblea Nacional decidirá por mayoría de sus integrantes si debe considerarse que hay falta absoluta.
Entonces, si el mismo presidente Hugo Chávez se declarara incapacitado en seguir en funciones, o si la junta médica sentenciara falta absoluta, Venezuela vivirá nuevas elecciones el 10 de febrero. Hecho que el mismo Chávez lo vaticinó en su última aparición pública: “Si se presentara una circunstancia que me inhabiliten y mandan a elecciones presidenciales, si se manda a convocar elecciones por las circunstancias de salud, respaldo a Nicolás Maduro como candidato, sería el candidato de la Revolución’ dijo.
Sin embargo, tanto el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, como el Vicepresidente han dicho en reiteradas ocasiones que harán respetar el poder popular, el mandato ciudadano y que es únicamente Hugo Chávez quien este a cargo del país petrolero de América Latina.
Cabello, en rueda de prensa transmitida en cadena nacional llamó a la población a salir a la calle el jueves para apoyar al líder socialista, un acto al que podrían asistir el presidente de Bolivia Evo Morales, el uruguayo José Mujica y el responsable ecuatoriano de Exteriores Ricardo Patiño. Quienes últimamente se han manifestado a favor de las decisiones de Maduro.
Desde el 11 de diciembre que fue intervenido, el mandatario venezolano no ha hecho ninguna aparición. Y es el Ministro de comunicación, Ernesto Villegas; y, el Ministro de Ciencia y Tecnología (además yerno de Chávez) Jorge Arreaza, los responsables de emitir los comunicados sobre la evolución médica del militar retirado de 56 años.
En el ultimo parte del Gobierno sobre la salud de Chávez, quien lleva 27 días de post operatorio, se dijo que esta ‘asimilando’ el tratamiento aplicado con ‘absoluta rigurosidad’ luego de sufrir una infección respiratoria y que se encuentra en una estado ‘estacionario’.
Por otro lado, la oposición venezolana exige ‘la verdad’ sobre la salud del mandatario, con miras a preparase para nuevos comicios. ‘Es esencial que el gobierno actúe de modo que dé confianza. Es esencial que diga la verdad’, dijo el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Ramón Guillermo Aveledo, tachando de ‘irresponsabilidad’ pretender hacer creer que Chávez está ‘en ejercicio’ de sus funciones y pidiendo ‘un diagnóstico y un pronóstico médico’ sobre su salud.
Mientras que Henrique Capriles, la joven figura opositora quien se enfrento al huracán bolivariano el pasado 7 de octubre, pidió ayer a los presidentes de América Latina que no respalden la posición del Gobierno. “Con el mayor respeto, le pido a nuestros presidentes de América Latina, que no se presten al juego de un partido político”. Además, insistió en que ‘todas las respuestas frente a la incertidumbre que ha generado el Gobierno están en la Constitución’.