El presidente Barack Obama se sentó el miércoles en el bus en el que Rosa Parks se negó a ceder su asiento a un blanco hace cerca de 60 años, un episodio histórico en el movimiento por los derechos civiles en Estados Unidos.
El primer presidente negro de Estados Unidos se detuvo el miércoles a ver el bus durante una visita al museo Henry Ford en Dearborn (Michigan), donde está expuesto y donde además Obama está de gira para recaudar fondos con vistas a obtener un segundo mandato presidencial.
“Apenas estuve sentado allí un momento y reflexioné sobre el coraje y la tenacidad, que son parte de nuestra historia reciente, pero que también son parte de una historia de larga data de gente que a veces no tiene nombre, que a menudo no aparece en los libros de historia, pero que ha insistido constantemente en su dignidad, en su participación en el sueño americano”, declaró a la prensa durante un evento posterior.
La afroamericana Rosa Parks se convirtió en una heroina del movimiento de los derechos civiles cuando se negó a ceder su asiento a un pasajero blanco en Montgomery, Alabama, en 1955, desatando una ola de protestas contra la segregación racial.